2. Pasión por Shonen Jump

Iwata:

Así que Ganbarion tenía experiencia y una sólida reputación. Yamagami, ¿cuáles fueron tus primeras impresiones al trabajar con la compañía?

Yamagami:

Para mí, no solo fue la cuestión de que les gustara One Piece. Fue el hecho de que todos en Ganbarion estuvieran tan puestos en Weekly Shonen Jump. Entonces pensamos que, como conocíamos también el tema, debíamos superarlos...

Iwata:

Pero no fuisteis rivales.

Yamagami:

Cierto. Lo sabían todo. No solo de la revista actual, sino de contenidos de hace diez, veinte y treinta años. Al darme cuenta pensé: "Si no se encarga esta gente del trabajo, no sé quién podría hacerlo".

Iwata:

Un conocimiento superficial no sirve para demostrar la adoración por Shonen Jump.

Yamagami:

De nuestro equipo, el más aficionado a Shonen Jump era Nakano, pero cuando empezaron a hablar del tema, dijo: "¡Vaya! ¡Es increíble!".

Nakano:

Recibimos los documentos de diseño del juego que Ganbarion había elaborado y vimos lo bien que habían seleccionado las escenas. Comprobé que lo sabían todo de todos y cada uno de los títulos. Sabía que, con ellos trabajando en el juego, no habría ningún problema.

Iwata:

Pero el diseño de Jump Super Stars estaba destinado a convertirse en un proyecto muy exigente. Recuerdo bien cuando Yamagami dijo: "Nakano puede soportar la presión, así que le encargaremos el proyecto a él".

Nakano:

Y comencé a trabajar en él con muchas ganas. Pero la planificación acabó siendo muy justa. Poco después de empezar, debíamos tener preparada una demo jugable.

Hoga:

Tuvimos que crear una demostración para Jump Festa9. 9 Jump Festa es una feria anual celebrada en diciembre en el Makuhari Messe, en la prefectura de Chiba, y con el patrocinio de Shueisha, la editorial de los títulos de de Shonen Jump.

Yamakura:

El desarrollo se puso en marcha en verano, y creamos una versión de demostración en tres o cuatro meses.

Nakano:

Y después teníamos menos de un año para finalizar el juego completo, con lo que me sentí como si estuviéramos trabajando continuamente para alcanzar entregas cada semana. Siempre había largas llamadas de teléfono después de las diez de la noche, y un compañero júnior que estaba junto a mi escritorio solía burlarse de mí, diciendo: "Ah, veo que ha vuelto a llamarte tu cariñito". Recuerdo que estaba todo el día enganchado al teléfono. (Risas)

Iwata Asks
Irie:

Veo que fue entonces cuando los dos comenzasteis a tener esas largas discusiones telefónicas.

Nakano:

Eso es. Eran muy largas.

Yamakura:

Hablaban un par de horas todos los días.

Nakano:

Tuvimos que establecer los contenidos de aquí y allá, así que no había opción de colocar nada en segundo plano.

Yamakura:

Hoga comenzó siendo muy formal al contestar al teléfono. Decía: "Sí, sí. Entiendo". Pero con el tiempo se volvió mucho más informal: "Ajá. Vale. Muy bien...". (Risas)

Hoga:

Es verdad. Acabé hablando bastante informal...

Nakano:

No, en realidad no me molestaba. Al fin y al cabo, eras mi cariñito.

Todos:

(Risas)

Iwata:

Hoga, ¿cómo crees que conseguisteis acabar todo y sobrevivisteis para contarlo?

Hoga:

Bueno, en nuestro plan dejamos claro que el jugador debía entretenerse con la gran cantidad de personajes que aparecerían en el juego. Ese plan detallaba con precisión en qué debíamos hacer hincapié. Y al tener las fechas de entrega que tenían que cumplirse, teníamos la determinación de tomar las decisiones que fueran necesarias.

Iwata:

Sin fechas de entrega, se habría convertido en un proyecto interminable. No había límite para los detalles que podíais incluir en el juego para regocijo de los fans de Shonen Jump.

Hoga:

Eso es. Fueron las fechas de entrega las que nos obligaron a acabar el trabajo.

Yamakura:

Nakano y Hoga no paraban de meter cosas, hasta el último minuto. Al final, Yamagami tuvo que pisar el acelerador y dijo: "Mira, necesitamos quitar esto".

Yamagami:

Es cierto. El rumbo que llevaba el proyecto tenía a todo el equipo bajo presión. Sabía que algunas de las funciones más arriesgadas tendrían que desecharse. Solo había que plantease el mejor momento para sacar el tema, algo por lo que acababa discutiendo con Yamakura.

Nakano:

Lo que me impresionó de verdad sobre el plan de Ganbarion para el juego fue... bueno, ya sabéis, los mangas salen a la venta semanalmente y, como es obvio, se empieza a trabajar en ellos con muy poca antelación, así que el juego, en su lanzamiento, no contendría material de los últimos episodios. Sin embargo, el plan de Ganbarion tenía un espacio en blanco en los documentos de diseño en el que debía figurar un movimiento especial, con la intención de incluirlo a partir de la última edición del manga. Y no se trataba de un único personaje, había montones de ellos. Pensé que Hoga sabía lo que se hacía.

Iwata:

Supongo que ese era un método que habían desarrollado al trabajar en tantos juegos de One Piece.

Hoga:

Precisamente. Si seguías una serie todas las semanas, te percatabas de las pautas de la historia...

Iwata:

Con lo que podíais prever cómo se iban desarrollando las tramas y cuándo iban a aparecer nuevos movimientos.

Hoga:

Sí, eso es. Así que hicimos el juego con un ojo puesto en la planificación y juzgando el tiempo del que disponíamos para avanzar con el material existente.

Nakano:

Suena como si camináramos en la cuerda floja.

Hoga:

Y así era. Pero, en mi caso, era la forma natural de desarrollar las cosas, y fue por la experiencia adquirida de haber trabajado en tantos juegos de One Piece.

Iwata Asks
Iwata:

Entiendo. Todo esto habrá puesto tus nervios a prueba, Yamagami. Después de todo, Nakano había abrazado por completo a Ganbarion. Su cariñito estaba allí, ya sabéis. (Risas)

Nakano:

Tengo la impresión de que creamos un vínculo muy estrecho basado en la confianza.

Yamagami:

Sí, eso es verdad. Con esta combinación de gente, Nakano acabó siendo parte del equipo de Ganbarion. (Risas)

Iwata:

Sí, eso es algo que me quedó patente. En su último proyecto le ocurrió lo mismo. Recuerdo que Nakano vino a hacer una presentación y daba la impresión de que venía en representación de Ganbarion.

Irie:

Eso es verdad. ¡Lo convertimos en uno de los nuestros! (Risas)

Nakano:

Antes de que pudiera darme cuenta, ¡me convertí en miembro de Ganbarion! (Risas)