4. ¡Quiero trabajar en Nintendo!

Iwata:

Yoshida, ¿qué te llevó a desear convertirte en un desarrollador de videojuegos?

Yoshida:

Ya mencioné anteriormente cómo solía entrar a escondidas en la habitación de mi hermano mayor. También tengo un hermano menor, y ambos solíamos jugar siempre al

Video: juego de lucha de Mario Bros. para dos

Yoshida, ¿qué te llevó a desear convertirte en un desarrollador de videojuegos?
juego de lucha de Mario Bros. para dos 15. Cuando me enfrentaba a él, siempre perdía. Se le daban mucho mejor los videojuegos a él que a mí. 15Mario Bros.: juego de acción que apareció en las máquinas recreativas en 1983 y salió a la luz posteriormente para la consola Famicom en Japón en septiembre del mismo año.

Iwata:

Sin embargo, normalmente los hermanos menores no suelen ganar a los mayores. Cuando eres pequeño, una leve diferencia de edad puede marcar la diferencia.

Yoshida:

Por lo general es verdad, pero las clases de mi hermano menor en la escuela terminaban antes que las mías, con lo cual llegaba a casa primero y se colaba en la habitación de nuestro hermano mayor para jugar.

Todos:

(Risas)

Iwata:

Entonces, ¿cuando entrabas a hurtadillas en la habitación de tu hermano mayor, tu hermano pequeño ya se había sometido a un entrenamiento exhaustivo? (Risas)

Yoshida:

Sí. Siempre me ganaba. Después, cuando llegaba nuestro hermano mayor a casa, bramaba: “¡Eh, vosotros dos! ¡Largo de aquí!”. (Risas)

Iwata:

(Risas)

Yoshida:

Por mucho que intentase vencer a mi hermano menor, no lo conseguía. Eso me llevó a pensar que, si hiciese un videojuego, podría crear niveles difíciles que él no pudiese pasar.

Iwata:

¡Qué forma de pensar tan interesante! (Risas)

Yoshida:

Aunque era solo un niño, comencé a idear todo tipo de cosas y a comprar papel milimetrado para dibujar fases de juegos y mapas de RPG. Cuando salió RPG Maker16, lo compré e intenté crear mi propio videojuego. 16RPG Maker: software obra de ENTERBRAIN, INC. que permite a los usuarios crear su propio RPG. Se han publicado muchas versiones de la serie, incluyendo ediciones para ordenadores personales, la consola Super Famicom, la Nintendo DS y otros dispositivos.

Iwata:

¿Querías crear tu propio juego para poner a tu hermano menor en su sitio?

Yoshida:

Sí. Pero se negaba a jugarlo. ¡A pesar de haberlo hecho precisamente para él!

Iwata Asks
Iwata:

Menuda lástima. (Risas)

Yoshida:

Así que se lo di a un amigo y le dije: “Aquí lo tienes, he trabajado duro en esto, así que juégalo”. Me puse muy contento cuando ese amigo me dijo después que estaba muy bien.

Iwata:

Jugar a videojuegos es sin duda divertido, pero cuando descubres el placer que supone crearlos, es un placer genuino que difiere bastante del que se siente al jugarlos.

Yoshida:

Sí. Me abrió los ojos de par en par. Vi a mi amigo jugar y pensé: “Ah, tal y como pensaba, se ha quedado atascado ahí...“.

Iwata:

(Risas) ¿Y esa emoción te llevó a desear convertirte en desarrollador de videojuegos?

Yoshida:

Sí. Si bien eso era cierto, tenía otra gran fuente de inspiración. La escuela primaria que frecuentaba disponía de una sala de ordenadores, y una de las clases versaba sobre escribir tus propios programas para mostrar imágenes. Por primera vez experimenté la sensación de ver en pantalla algo que había programado yo mismo, y me dije: “Creo que podría crear un videojuego”. Estaba en cuarto año de la escuela de primaria, pero tenía ya el firme deseo de dedicarme a crear videojuegos.

Iwata:

Matsuura, ¿qué te llevó a querer crear videojuegos?

Matsuura:

En mi primer año en el instituto me hice con Super Mario 64, y me pareció tan divertido que pensé: “¡Quiero trabajar para Nintendo!”. Para Yoshida, ese momento se produjo en cuarto curso de primaria, así que...

Iwata:

Siempre hay alguien que se te adelanta. (Risas)

Matsuura:

Sí, iba con retraso. (Risas) Se me daba bien la clase de lengua japonesa, pero no las matemáticas. Con todo, me apliqué en los cursos de matemáticas y ciencias, y en mi primer año en el instituto decidí que quería ser programador. No obstante, como estudiante de instituto, el trabajo de programador era el único que se me ocurría vinculado a los videojuegos. No conocía el ámbito de los diseñadores. Pensaba que los programadores lo hacían todo.

Yoshida:

Ah, igual que yo.

Iwata:

Bueno, ¡lo cierto es que en un pasado lejano eso era del todo cierto! (Risas)

Matsuura:

Cursé estudios de programación y conseguí entrar en Nintendo, pero, al igual que Amano, al principio me asignaron al Mario Club para trabajar en tareas de depuración. Tenía conocimientos de programación, por lo que sabía dónde sería probable que se produjesen fallos y lo consideré un trabajo apropiado para mí.

Iwata Asks
Iwata:

Conoces los principios que subyacen en el juego, por lo que es fácil de imaginar.

Matsuura:

Sí. Por ejemplo, me preguntaba qué pasaría si jugases todos los niveles con Mini Mario, el Mario diminuto. Cuando lo hice, había una fase con varios champiñones grandes alineados, y aunque no hay espacio entre ellos, me caí a medio camino corriendo por ellos.

Iwata:

Te podías caer porque eras muy pequeño.

Matsuura:

Eso es. Cuando estaba haciendo eso, pensaba que tal vez podría

Video: crear pistas con Mini Mario

Yoshida, ¿qué te llevó a desear convertirte en un desarrollador de videojuegos?
crear pistas con Mini Mario para niveles en donde no solías utilizarlo. Al final, 8 de las 65 pistas de New Super Mario Bros. Wii atañen a Mini Mario.

Iwata:

Amano había grabado los vídeos de las Jugadas maestras siete años antes, y ahora tú hiciste lo propio.

Matsuura:

Sí. En realidad los que jugaron fueron los depuradores, pero me mandaron asegurarme de que se metieran por el centro de la tubería y de que no saltasen más de lo necesario. Es más, me dijeron que cuando dos monedas estuviesen flotando juntas en el aire, había que o bien coger ambas o bien ni intentarlo.

Iwata:

(Risas)

Matsuura:

¡No podíamos dejar ni una moneda!

Iwata:

Lo entiendo. No quedaría bien.

Amano:

Cierto. El vídeo de una pista debe quedar bien. Si bien las pistas suelen presentar un buen aspecto, ¡las Jugadas maestras tienen que ser perfectas!

Nishimura:

Mi silla estaba cerca de la de Asuke y Amano, y recuerdo cómo miraban ambos la pantalla y solía oírles comentar: “¡Huy, casi lo consigues!” o “¡Le ha faltado un pelo!”. (Risas)

Matsuura:

Yo decía que todavía no era apta y grababa las pistas una y otra vez con los depuradores. ¡Por eso fui yo quien derramó alguna lágrima aquella vez! ¡Porque Asuke y Amano me hicieron llorar!

Todos:

(Risas)

Iwata:

La historia se repite. (Risas)

Matsuura:

¡Eso parece! (Risas)